Miedos infundados

Hola, mi chiqui:

Estos días estoy siendo un poco injusta contigo; sé que debería disfrutar de cada momento que compartimos y ofrecerte toda la felicidad que te mereces, pero estoy tan asustada de la posibilidad de perderte tan pronto,  que demasiadas veces me dejo llevar por estos miedos sin sentido, sin apreciar el regalo que me haces cada día sólo por existir dentro de mi.

Espero que se una más de las fases, son tantas las cosas que están ocurriendo que estoy un poco desbordada y bastante asustada de no ser capaz de protegerte. Pero supongo que es algo inherente a ser padre, no poder evitar sufrir por sus hijos, aunque apenas midan 1 centímetro, como tú.

Debería escuchar más a tu padre, que me recuerda lo bien que estás ahí dentro calentito, protegido y creciendo un poco más cada día. Aún así, este mes se me hará muy largo, y espero que tengas paciencia  conmigo, lo hago lo mejor que puedo, pero puedo prometer que me esforzaré en pensar en positivo, intentando no envolverte demasiado en los miedos que me provocó perder a tu hermana.

Te quiere,

Tu mamá

Ilusión teñida de añoranza

Hola, Chindy:

Sé que es un nombre un poco raro, yo quería que fueses Chispita hasta poder darte tu futuro nombre, pero tu papá ha insistido con este mote cariñoso, así que por ahora, eres nuestro pequeño ( o pequeña) ChindyWonder ( Chindy para abreviar).

He tardado un poquito en empezar a escribirte; todavía echo mucho de menos a tu hermana y aunque estoy inmensamente feliz de tenerte creciendo dentro de mi, una pequeña parte de mi está aterrada de sufrir de nuevo otra pérdida tan dolorosa. Pero como dice tu papá, sabemos que has venido para quedarte. Creo que muchos de los que hemos vivido la tragedia de perder un hijo tan temprano, tenemos a cambio muchos hijos especiales: aquellos que nos dieron tanta alegría pero que tuvieron que marcharse pronto  para que llegaráis vosotros, los que os empeñáis en demostrar que nuestros miedos no vencerán a la esperanza. 

El otro día te vimos por primera vez por la pantalla. Todavía eres muy chiquitín, apenas 1 cm, esta vez con una semana de retraso, frente al mes de adelanto de tu hermana. Cada día haces que me acuerde de ella, y a la vez te comportas diferente, concediéndome el regalo de disfrutar de su recuerdo y tu embarazo. Porque desde el principio ya te quiero mucho, aunque me dé miedo admitirlo; sólo puedo prometerte que intentaré que este miedo traído del pasado no nos impida disfrutar de estos meses por venir, ni de los muchos años que podremos disfrutar juntos, estoy segura. 

Y aunque tu hermana Aroa siempre va a ocupar un lugar muy especial en mi corazón, sé que este crecerá sin restricciones para ofrecerte el mismo amor y cariño que cada día tengo para ella. Sólo espero ser capaz de hablarte de ella, de explicarte lo importante que fue para nosotros y para que tu vinieras, pero sin hacerte dudar por un segundo de lo especial que eres tu también, de lo afortunada que soy de tener a mis dos niños queridos. 

Te quiere,

Tu mamá