Hola, mi niño:
Sólo quedan 24 horas para ir al hospital, donde espero que en unas cuantas horas más te tengamos entre los brazos, mirándonos por primera vez. Intento no pensar demasiado estos últimos días y cuando mi mente comienza a divagar me obligo a pensar que tengo que seguir confiando en ti, pues durante meses me has demostrado que eres un valiente y que has venido para quedarte.
Espero ser capaz de disfrutar este parto, de hacer que sea algo especial, aunque sea teñido por algo de miedo. Sé que esta vez serán mis dos hijos los que estarán conmigo, cada uno a su manera, en presencia y espíritu, y eso me dará confianza y ánimo.
Son muchos los amigos y familiares que nos han apoyado en el camino, que van a envolvernos de energía positiva los próximos días; aunque podemos tener creencias diferentes,lo que sí que creo es que cada uno de ellos cuenta. La mayoría han compartido la pena, pero también ese amor y recuerdo tan especial que nos regaló tu hermana; pero todos necesitamos que está vez sea diferente.
Durante meses he intentando encontrar el equilibrio entre el miedo y la ilusión, y especialmente en estos últimos días, intento rechazar la posibilidad de que se repita la tragedia. Pero sé que en las próximas horas, cuando los 2 empecemos el parto, tengo que dar un paso más allí y creer de corazón que ambos podemos hacerlo. Dicen que los padres aprenden tanto de los hijos como a la inversa. Con tu hermana aprendí que el amor puede ser indeleble, que la vida sigue aunque lo peor ocurra, que la maternidad a veces no es lo que uno espera. Espero que mañana, con ella en mi corazón y contigo luchando a mi lado, logre encontrar esa fuerza y armonía.
Espero que la próxima vez pueda continuar escribiendo acunándote entre mis brazos. Te quiere y te querrá siempre, pase lo que pase:
Tu mamá
Chispita de esperanza
Desde el principio, hasta siempre
domingo, 1 de septiembre de 2013
lunes, 5 de agosto de 2013
El tiempo pasa
Hola, mi chiquitín:
Ya sé que a tu tía Raquel no le hace gracia el sobrenombre, por aquello de que tienes que creer en las cosas que deseas conseguir, pero a mi no me importa que sigas siendo mi chiquitín mientras sigas creciendo y bailando dentro de mi barriga, así que espero que por mucho tiempo pueda llamarte así.
Las semanas pasan y aunque la espera se hace eterna, queda más o menos un mes para que podamos ver tu carita. Espero poder mirar hacia atrás y poder pensar que todos esos miedos fueron infundados, sentirte tan vivo entre mis brazos como ahora te siento dentro de mi. Porque aunque sé que no tuve la culpa de que tu hermana se marchara, me aterra pensar que hay algo en mi que pueda causarte algún mal. Sé que sigue siendo el mismo miedo de siempre, y me repito que debo confiar en que te podrás quedar conmigo, pero es una creencia que no será del todo real hasta que te tenga vivo en mis brazos.
Son unas semanas diferentes a lo que había pensado, menos duras quizás por la propia impotencia, que
me obliga a elegir entre la ilusión y desesperanza, y me niego a rendirme antes de tiempo. Y aunque quizás debería hablarte más, contarte esos cuentos como había planeado, disfruto acariciando nuestra barriga, jugando con tus pataditas ( pues claramente eres mucho menos tímido que tu hermana), planchando y apilando tus ropitas, aunque todavía me de algo de impresión comprarlas.
Estos días ha nacido tu amiguito Neizan, al final todo bien aunque algún susto por el camino. Es un bebe muy tranquilo y tu padre comentaba que nosotros ya nos podemos preparar, que si ya eres tan inquieto dentro, seguro que serás un terremoto fuera. Espero que sea como sea podamos presentaros en unas cuantas semanas y hacer paseos conjuntos.
Bueno, mi niño, por hoy te dejo, pero ya sabes que pienso en ti cada minuto del día.
Te quiere mucho,
tu mamá
Ya sé que a tu tía Raquel no le hace gracia el sobrenombre, por aquello de que tienes que creer en las cosas que deseas conseguir, pero a mi no me importa que sigas siendo mi chiquitín mientras sigas creciendo y bailando dentro de mi barriga, así que espero que por mucho tiempo pueda llamarte así.
Las semanas pasan y aunque la espera se hace eterna, queda más o menos un mes para que podamos ver tu carita. Espero poder mirar hacia atrás y poder pensar que todos esos miedos fueron infundados, sentirte tan vivo entre mis brazos como ahora te siento dentro de mi. Porque aunque sé que no tuve la culpa de que tu hermana se marchara, me aterra pensar que hay algo en mi que pueda causarte algún mal. Sé que sigue siendo el mismo miedo de siempre, y me repito que debo confiar en que te podrás quedar conmigo, pero es una creencia que no será del todo real hasta que te tenga vivo en mis brazos.
Son unas semanas diferentes a lo que había pensado, menos duras quizás por la propia impotencia, que
me obliga a elegir entre la ilusión y desesperanza, y me niego a rendirme antes de tiempo. Y aunque quizás debería hablarte más, contarte esos cuentos como había planeado, disfruto acariciando nuestra barriga, jugando con tus pataditas ( pues claramente eres mucho menos tímido que tu hermana), planchando y apilando tus ropitas, aunque todavía me de algo de impresión comprarlas.
Estos días ha nacido tu amiguito Neizan, al final todo bien aunque algún susto por el camino. Es un bebe muy tranquilo y tu padre comentaba que nosotros ya nos podemos preparar, que si ya eres tan inquieto dentro, seguro que serás un terremoto fuera. Espero que sea como sea podamos presentaros en unas cuantas semanas y hacer paseos conjuntos.
Bueno, mi niño, por hoy te dejo, pero ya sabes que pienso en ti cada minuto del día.
Te quiere mucho,
tu mamá
sábado, 13 de julio de 2013
Obstáculos en el camino
Hola, mi chiquitín:
Hace 2 semanitas que vimos tu cara por primera vez, dormidito, haciendo piruetas con los pies. A pesar de media hora de incordiarte con el ecógrafo, apenas hiciste un mohín y ahí seguías, durmiendo tan pancho, doblado con un pie en la cabeza. Pero aún así fue muy especial verte tan real, tan formadito. Tanto tu padre como yo estuvimos de acuerdo en que contigo no es tan sencillo sacar parecido, pues aunque tienes mi nariz, al igual que tu hermana, tus gestos y perfil nos recordaban más a tu papá.
Hace también poco más de 2 semanas tuvimos la ecografía de las 28 semanas. Era una prueba extra por el protocolo de alto riesgo y aunque fuimos confiadas, nos llevamos un pequeño susto: de nuevo a diferencia de tu hermana, que siempre estuvo bien hermosa, parece que venías chiquitín. Tras comentarlo con una amiga, ya nos quedamos más tranquilos, más reposo y comer y quizás olvidarnos de los planes de NBA que tu padre te tenía reservados.
Y ayer volvimos a ir a la obstetra, que nos repitió la ecografía de control. Y de nuevo parece que no creces suficiente, mi niño. Así que nos tienes de nuevo un poco asustados. Sabemos que todo lo demás va bien, que te mueves sin problema, que no hay signos de que no te lleguen bien los nutrientes, pero tu sigues pequeñito y habrá que mirarte cada semana, por si hay que sacarte antes de lo esperado. Y yo me repito que sigues siendo el mismo pequeño luchador, que no dejaremos que esto nos detenga, pero ruego a tu hermana que te vigile entre los controles, pues aunque tengas que venir antes y distinto a lo que nos esperábamos, todo estará bien siempre que pueda acabar contigo vivo entre mis brazos.
Así que crece y sigue luchando, mi vida, que tus papás te están esperando. Te queremos,
Mamá y papá
martes, 2 de julio de 2013
Creciendo poco a poco
Hola, mi niño:
La verdad es que el tiempo ha ido pasando con cuentagotas, pero ahora miro hacia atrás y veo que ya hace mes y medio del ultimo post. Y es que mirando hacia delante el tiempo parece apenas fluir, pero vamos dejando atrás ya más de 6 meses, 24 semanas de ilusiones y miedos, de esperanza comedida. Pero tú sigues ahí ajeno a ello, creciendo y moviéndote como el guerrero que eres, siempre respondiendo cuando tu madre echa en falta tus pataditas.
Te quiere, mama
sábado, 18 de mayo de 2013
Buscando el nombre
Hola, Chiquitín:
Todavía seguimos buscando nombre. Hace poco pensaba que ya estábamos cerca del éxito, pero parece que se nos está resistiendo. Sé que hace tiempo que no escribo, pero sé que notas como cada día pienso en ti, me acaricio la barriga y disfruto con tus pataditas; quizás por eso escribo más en el otro blog que en este, porque a ti te sigo teniendo conmigo y es a tu hermana a la que necesito recordar, para sentir que todavía sigue presente.
Cada día te mueves más, cómo si quisieras reafirmar que ahí estás, que has venido para quedarte, a pesar de mis dudas. Algunas veces me siento culpable de no vivir más intensamente este embarazo, de teñirlo de miedo. Sabes que te quiero con locura, pero lamento no ser capaz de hacer planes o comprarte cositas con la misma inocencia que ofrecí a tu hermana; confío en que nos sea concedido tiempo para compensarlo.
Te prometo que seguiré enfrentándome a mis temores, que dejaré que esas ganas de vivir que has demostrado desde el principio me devuelvan esa ilusión. Quizás por eso tengo ganas de ponerte nombre, cada pequeño detalle que te reafirma es algo que hace más real ese futuro juntos. Mientras seguiré intentando vivir más el presente, disfrutar de cada semana que pasas conmigo, y no dejarme cegar por la cuenta atrás hasta tenerte en mis brazos.
Te quiere y lo demuestra lo mejor que puede:
Tu mamá
jueves, 4 de abril de 2013
Las primeras pataditas
Hola, Chindy:
Dado que tu padre sigue gamberreando respecto a tu nombre, seguiremos con el apodo el tiempo que haga falta, con tal de no admitir Ambrosio como animal acuático.
Estos días han sido algo especiales, pues tus tías han estado pasando con nosotros unos días. He tenido que frenarles para evitar que te compraran muchas cosas, aunque algún dragoncito ha caído, así como mi ansiado llamador de ángeles, que pienso llevar cada día bien cerquita de nuestra tripa. Y sobre todo lo hemos pasado muy bien paseando juntas, pero también imaginando cómo será cuando estés con nosotros, qué nombre te pondremos al final, si serás realmente una copia de tu padre, o al igual que tu hermana saldrás más a tu madre.
Y se emocionaron al verte removerte en la eco, una pequeña sorpresa orquestada con ayuda de Alba, un cielo de compañera. Fue divertido ver sus caras mientras te movías, a veces de espaldas, otras estirando los bracitos. Y después, entre delicioso sushi, cocas y demás delicias, has empezado a reclamar tu sitio, con todavía suaves pero precoces pataditas, como nuestra prominente tripa. Así que ahora esperaré cada día emocionada volver a sentir esos pequeños toques que me acercan a tí, y que me permiten alejar los miedos que nunca se marchan del todo.
Te quiere, y conmigo toda la familia también:
Tu mamá
Dado que tu padre sigue gamberreando respecto a tu nombre, seguiremos con el apodo el tiempo que haga falta, con tal de no admitir Ambrosio como animal acuático.
Y se emocionaron al verte removerte en la eco, una pequeña sorpresa orquestada con ayuda de Alba, un cielo de compañera. Fue divertido ver sus caras mientras te movías, a veces de espaldas, otras estirando los bracitos. Y después, entre delicioso sushi, cocas y demás delicias, has empezado a reclamar tu sitio, con todavía suaves pero precoces pataditas, como nuestra prominente tripa. Así que ahora esperaré cada día emocionada volver a sentir esos pequeños toques que me acercan a tí, y que me permiten alejar los miedos que nunca se marchan del todo.
Te quiere, y conmigo toda la familia también:
Tu mamá
jueves, 21 de marzo de 2013
Mini Joe
Hola, chiquitín:
La verdad es que con la vuelta al trabajo he dejado pasar las semanas y apenas os he escrito una linea, ni a ti ni a tu hermana, a pesar de que sois una presencia constante en cada momento de mi vida.
Hace ya unas semanas que fuimos a hacer tu primera ecografía oficial ( porque la verdad es que tengo la suerte de que cada vez que voy a la obstetra nos obsequia con unos pocos minutos de verte, con tu corazón latiendo bien fuerte). Todo salió bien, riesgos bajos y demás,y tú con la manita en la boca como tu hermana, posando para la cámara. Es emocionante verte a través de la pantalla, tan pequeñito pero tan perfecto, siguiendo adelante a pesar de mis miedos.
Y a los pocos días, sorpresa: será niño! Así que de nuevo marcando diferencias, todos contentos pero esta vez tu papá y la familia paterna imaginando felices un mini-Joe, o Joe Jr., como te llama tu tía. Da igual que al final sea cierto o no ( aunque yo realmente creo que lo es), todos te queremos desde el primer día, aún con sexo indefinido; sólo esperamos que sigas creciendo tan valiente como hasta ahora y que llegue el día que podamos mecerte, vivo y feliz, entre nuestros brazos.
Un besito de tus papás, que te quieren mucho:
Tu mamá
La verdad es que con la vuelta al trabajo he dejado pasar las semanas y apenas os he escrito una linea, ni a ti ni a tu hermana, a pesar de que sois una presencia constante en cada momento de mi vida.
Hace ya unas semanas que fuimos a hacer tu primera ecografía oficial ( porque la verdad es que tengo la suerte de que cada vez que voy a la obstetra nos obsequia con unos pocos minutos de verte, con tu corazón latiendo bien fuerte). Todo salió bien, riesgos bajos y demás,y tú con la manita en la boca como tu hermana, posando para la cámara. Es emocionante verte a través de la pantalla, tan pequeñito pero tan perfecto, siguiendo adelante a pesar de mis miedos.
Y a los pocos días, sorpresa: será niño! Así que de nuevo marcando diferencias, todos contentos pero esta vez tu papá y la familia paterna imaginando felices un mini-Joe, o Joe Jr., como te llama tu tía. Da igual que al final sea cierto o no ( aunque yo realmente creo que lo es), todos te queremos desde el primer día, aún con sexo indefinido; sólo esperamos que sigas creciendo tan valiente como hasta ahora y que llegue el día que podamos mecerte, vivo y feliz, entre nuestros brazos.
Un besito de tus papás, que te quieren mucho:
Tu mamá
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